Las gyozas son un platillo icónico que ha ganado popularidad en todo el mundo, no solo por su exquisito sabor sino también por su curiosa historia y técnicas de preparación. Originarias de China pero ampliamente adoptadas y adaptadas en la gastronomía japonesa, las gyozas se han convertido en un símbolo de la cocina asiática. A través de este artículo, exploraremos en profundidad qué son gyozas, sus ingredientes, sus variaciones y cómo hacerlas en casa.
Conocer qué son gyozas es adentrarse en una experiencia culinaria que va más allá del simple saciar el hambre. A través de cada bocado, puedes sentir las tradiciones culturales que han sido transmitidas a lo largo de los siglos. Así que prepárate para sumergirte en el fascinante mundo de las gyozas, descubrir sus secretos de elaboración, y aprender a disfrutar de este manjar que encanta a paladares de todas las edades.
Historia de las gyozas
Los orígenes de las gyozas en China
Las gyozas tienen sus raíces en la antigua cocina china, donde se conocen como «jiaozi». Se cree que fueron creadas durante la dinastía Han, hace más de 1.800 años. Inicialmente, eran consideradas un alimento para los pobres, ya que utilizaban ingredientes accesibles y fáciles de conseguir. Con el tiempo, su popularidad creció entre todas las clases sociales, especialmente durante festividades importantes como el Año Nuevo Chino. La forma de las gyozas simbolizaba riqueza, ya que se asemejaban a lingotes de oro.

La adaptación japonesa
Las gyozas encontraban su camino de China a Japón tras la Segunda Guerra Mundial, siendo influenciadas por la escasez de alimentos de la época. En Japón, el plato fue adaptado y se comenzaron a usar ingredientes frescos y locales. Así nació la versión japonesa de las gyozas, que suele ser más delgada y rellena en su mayoría de carne de cerdo, repollo, ajo, cebolla y especias. Desde entonces, este platillo ha formado parte integral de la cocina japonesa, particularmente en izakayas y restaurantes de ramen, convirtiéndose en un favorito no solo en Japón, sino internacionalmente.
Tipos de gyozas
Según su forma de cocción
Existen diferentes formas de cocinar las gyozas, cada una aportando una textura y un sabor únicos al plato. Las más comunes son las siguientes:
- Gyozas al vapor: Cocinadas en una vaporera, estas gyozas cuentan con una textura suave y húmeda, permitiendo que los sabores del relleno resalten al máximo.
- Gyozas fritas: La versión más popular en restaurantes, donde las gyozas se fríen en aceite caliente, creando un exterior crujiente, mientras que el interior permanece tierno y jugoso.
- Gyozas hervidas: Aunque menos comunes, esta técnica implica cocer las gyozas en agua hirviendo. El resultado es mucho más ligero, aunque menos sabroso que las versiones fritas o al vapor.
Variedades regionales
Además de las diferencias en la cocción, las gyozas también varían según la región. En China hay numerosas variaciones; por ejemplo, algunas regiones utilizan mariscos como el relleno, mientras que en otras son comunes las gyozas vegetarianas. En Japón, las gyozas tienden a ser más picantes y están a menudo acompañadas de salsa de soja y vinagre para realzar el sabor. Cada variante lleva consigo historias y tradiciones culturales, aportando a que las gyozas sean un plato versátil e interesante de explorar.
Ingredientes esenciales para las gyozas
La masa de gyoza
La base de cualquier buena gyoza comienza con la masa. Para hacer la masa de gyoza, se requiere simplemente de harina de trigo, agua y una pizca de sal. La clave está en conseguir una textura suave y elástica, que a su vez sea lo suficientemente resistente para mantener el relleno en su interior durante la cocción. Para ello, es recomendable amasar bien la mezcla y dejarla reposar, lo que permite que el gluten se desarrolle adecuadamente.

Relleno de gyoza
El relleno de las gyozas es donde podemos dejar volar nuestra creatividad. El relleno más clásico incluye carne de cerdo picada, col china, cebolla, ajo y jengibre, aunque las posibilidades son casi infinitas. Por ejemplo, podemos hacer gyozas de pollo, ternera, verduras o incluso gyozas dulces rellenas de pasta de frijol rojo, lo que demuestra que este platillo puede ser adaptado según el paladar de cada persona. La clave de un buen relleno está en la proporción de ingredientes y en la técnica de picado, ya que deben ser lo suficientemente pequeños para facilitar el cierre de la masa.
Cómo hacer gyozas en casa
Preparación de la masa
Comenzar a hacer gyozas en casa puede parecer un reto, pero con un poco de práctica, es una tarea completamente asequible. Para la masa, mezclar 2 tazas de harina de trigo con 1/2 taza de agua caliente y una pizca de sal. Amasar hasta obtener una textura homogénea, luego cubrir con un paño húmedo y dejar reposar por al menos 30 minutos. Este paso es esencial para conseguir la textura perfecta que mantendrá el relleno seguro en su interior.
Elaboración del relleno
Una vez que la masa ha reposado, es momento de preparar el delicioso relleno. En un bol, mezclar 250 gramos de carne de cerdo picada con 100 gramos de repollo finamente picado, 2 dientes de ajo triturados, 1 cucharada de jengibre fresco rallado, 1 cucharada de salsa de soja y 1 cucharadita de aceite de sésamo. Este mix no solo aportará sabor, sino que también ayudará a que el relleno mantenga su jugosidad. Prueba el relleno antes de usarlo, ¡es una forma divertida de asegurarte de que queda bien sazonado!
Formando las gyozas
Para armar las gyozas, toma pequeñas porciones de masa y extiéndelas en círculos delgados. Es importante que no sean demasiado finos, ya que podrían romperse durante la cocción. Luego, coloca una cucharadita del relleno en el centro de cada círculo antes de humedecer los bordes con un poco de agua. Esto es crucial para asegurar que se sellen bien al cerrar. La forma tradicional es doblarlas por la mitad y hacer pequeños pliegues en los bordes, pero hay muchas maneras de jugar con su forma y diseño. ¡Deja volar tu imaginación!

Cocción de las gyozas
Una vez que hayas armado tus gyozas, es tiempo de cocinarlas. Para la versión frita, calienta una sartén grande a fuego medio-alto y añade un poco de aceite. Cuando esté caliente, coloca las gyozas con el lado plano hacia abajo y deja que se frían hasta que estén doradas. Luego, añade un chorrito de agua, cubre la sartén y deja que se cocinen al vapor durante aproximadamente 5-7 minutos. Esta técnica de dorar y luego vaporizar ofrece una combinación de sabores que deleitará tus sentidos, dándole un exterior crujiente y un interior jugoso.
Consejos para servir gyozas
Las salsas ideales
Un aspecto importante al hablar de gyozas es la forma de acompañarlas. Generalmente, se sirven con una salsa hecha de una mezcla de salsa de soja, vinagre y aceite de sésamo. Esto no solo realza el sabor, sino que también ofrece una experiencia culinaria más completa. Algunos amantes de las gyozas ακόμη prefieren añadir un poco de chile para darle un toque picante, lo cual es otra excelente alternativa que no te decepcionará.
La guarnición perfecta
A la hora de disfrutar de las gyozas, puedes complementar el plato con una guarnición de verduras en pickle o una ensalada ligera. Estos acompañantes no solo ofrecen un contraste crujiente, sino que también ayudan a equilibrar la riqueza de las gyozas fritas. También es común verlas servidas con arroz al vapor o una sopa ligera, aportando un toque reconfortante a la comida.
Conclusión
Las gyozas son mucho más que un simple aperitivo; son una ventana a la cultura y la tradición culinaria de Asia. Desde su rica historia en China hasta su popularidad en Japón, este platillo ha evolucionado a lo largo de los años, adaptándose a los gustos de diferentes culturas. Aprender qué son gyozas y cómo hacerlas en casa es una experiencia gratificante que puede disfrutarse en compañía de familiares y amigos. No dudes en experimentar con diferentes rellenos y técnicas de cocción, ¡las posibilidades son infinitas! Al final, lo más importante es disfrutar del proceso y, por supuesto, de cada delicioso bocado.
